¿Nunca os ha sucedido que compráis plátanos y os acaban sobrando? A mis hijos les encantan, pero son unos veletas a la hora de comerlos. Unos días los devoran y no dejan ni uno y otros ni los tocan. Con lo cual, hay veces que sobran y ya están tan maduros que no les gustan. Y con los que hacemos la macedonia del menú pasa lo mismo.
Para aprovecharlos, os traigo la receta de los buñuelos de plátano. Es una forma rápida y fácil de usar esos plátanos que los niños ya no quieran. Y os lo digo yo que no me gusta nada el plátano!
Ingredientes:
- Dos plátanos
- Azúcar
- Harina
- Sal
- Levadura
Preparación: de los buñuelos de plátano
Cómo no, empezamos por lo principal que es pelar los plátanos. Sé que es obvio, pero luego Nachete quiere usar mi receta y si no le digo todos los pasos, la lía muy gorda. Una vez les quitamos la cáscara, los metemos en un bol y los machacamos. Podemos usar tanto un tenedor como una cuchara.
A continuación, para irle dando más consistencia, vamos echando harina al mismo tiempo que removemos para que todo se mezcle. Cuando la masa no admita más, echamos otro poco y así hasta obtener la cantidad que queramos.
También tendremos que ir echando un pellizco de sal y azúcar al gusto. A mí no me gusta echarle demasiada azúcar, ya que creo que los plátanos de por si ya tienen la natural y puede empalagar.
Además, tenemos que echar levadura para que suba. Tras esto, hay dos opciones. La primera es dejar que la levadura se active, pero esto nos llevará casi una hora. Un pequeño truco es poner la masa en el microondas. Lo ponemos a potencia baja (la mínima que nos permita) y de tiempo, un minuto. Así hará que la levadura se active.
Echamos en una sartén abundante aceite y lo ponemos al fuego. Cuando se caliente, es el momento de echar la masa. Nosotros usamos una cuchara. Para que no se pegue, antes la metemos en agua, así resbala mejor.
Con cuidado de no salpicarnos, ponemos las bolitas de buñuelo en el fuego y damos vueltas para que se hagan bien por todos los lados. ¡Pero vigilando que no se quemen!
Y de esta forma tenemos una buena ración de buñuelos de plátano. Como os he dicho, cuanto más queráis, más plátanos necesitáis. Si los queréis más azucarados tan solo tenéis que poner más azúcar. Aunque en algunos países no son postre, son comida. Incluso se toman con picante. Quizás quede bien algo de Doctor Salsas. Que os aproveche.